Los Premios Grammy, establecidos en 1958, son uno de los más grandes honores en la industria de la música. John Billings, propietario de Billings Artwork, tiene una profunda conexión con el premio, puesto que lleva más de 30 años fabricándolo.
"Comencé a trabajar en los premios Grammy en 1976 en California, como un aprendiz de Bob Graves, quien era un maestro fabricante de moldes", nos cuenta John. "Bob elaboraba moldes para figuras de trofeos de metal para muchas de las empresas de trofeos de ese entonces y también elaboró los moldes para la primera entrega de los Premios Grammy en 1958. Después de siete años de aprendizaje, Bob falleció y yo compré el negocio a su viuda y lo trasladé a mi garaje. En ese momento, fabricaba alrededor de 130 premios Grammy al año y la mayor parte de mi trabajo tenía que ver con la elaboración de moldes".
Aunque el premio Grammy mismo se crea a partir de un molde, el texto en las placas de nombre y los números de serie se graban. John comenzó a grabar las placas de los premios Grammy en un Pantógrafo New Hermes antiguo. Él explica que la máquina tenía una bandeja de letras de latón que el operador debía deslizar de a una a la vez en una ranura y luego, encajarlas en su lugar. Las letras se trazaban con una aguja en una mano, mientras que con la otra, se sujetaba una herramienta de grabado por arrastre que transfería las letras a una placa de latón. El proceso era largo y tedioso, y John recuerda que no era inusual dedicar hasta tres horas a grabar solo un Grammy.
Gracias a mi sistema Epilog, cuento con un nuevo conjunto de herramientas que, con mi creatividad y habilidades, me ayudará a lograr un enrome progreso, en comparación con mi modesto comienzo.
John Billings
Dada la necesidad de utilizar otras herramientas para grabar los galardones, John asistió a su primera exhibición de la Awards & Recognition Association en Las Vegas en 1986. Allí encontró el Dahlgren Wizzard, lo compró de inmediato y lo ha utilizado durante los últimos 25 años. Si bien el equipo Dahlgren redujo considerablemente el tiempo de grabado para John, el tamaño de los proyectos que podía realizar se veía limitado por el tamaño pequeño de la mesa.
"Buscaba un grabador que me permitiera grabar artículos más grandes", señaló John. "Durante años, había visto láseres en revistas de la industria, pero nunca lograba encontrar justificación para tal gasto. Por consiguiente, comencé a investigar, descargar manuales, leer comentarios y opiniones en diversos foros y, tiempo después, no podía sacarme a Epilog de la cabeza".
John determinó que el modelo Hélix de Epilog era el que mejor satisfacía sus necesidades de grabado. Él cuenta que, después de su primer trabajo, estaba ansioso por experimentar con más proyectos. "Incluso antes de que Sean, un representante de Innovative Cutting Systems, acudiera a nuestra capacitación in situ, había experimentado con todo tipo de materiales en el taller y siempre se me ocurrían nuevas ideas y aplicaciones".
La creación de cada premio Grammy desde cero es un proceso demoroso; sin embargo, el sistema Epilog de John reduce el tiempo de grabado en varios de los componentes. "Cuando Sean llegó, ayudó a crear un plantilla que nos permitiera grabar 40 placas de Grammy de una vez; me impresionó mucho. Además, cada Grammy debe llevar su propio número de serie; antes, grabábamos una pequeña placa de latón que luego pegábamos en la parte inferior. Con mi sistema Epilog, corto una plantilla de Plexiglass y ahora solo deslizo la base del premio en el láser para grabar el número de serie y nuestro logotipo, lo que no demora más de 20 segundos".
John nos cuenta que, actualmente, elabora cerca de 700 premios Grammy al año y cuenta con más de diez horas para trabajar en ellos. Si bien dedica a los Grammy la mayor parte de su tiempo, en ocasiones realiza trabajos de grabado y elaboración de moldes diferentes para otras organizaciones.
"Definitivamente, los Grammy constituyen la mayor parte de mi trabajo de grabado, pero siempre enfrento el desafío de hacer algo nuevo y diferente. Aún no desembalaba mi Hélix cuando recibí una llamada de nuestro departamento de bomberos voluntarios, pues necesitaban una placa para una presentación especial. "Genial, ahora puedo crear algo realmente fabuloso en lugar del típico texto sobre una placa de latón pegado en una placa de madera", pensé. Revisé algunos catálogos y descubrí una placa de acrílico realmente hermosa, escaneé un logotipo del departamento de bomberos voluntarios, elegí un tipo de fuente bonito, coloqué el texto y listo. Me enorgulleció mucho la calidad y la apariencia de la placa terminada y no podía creer lo fácil que fue elaborarla. Por supuesto que fue de mucha utilidad dedicar dos meses a leer el manual y ver los tutoriales en el sitio web de Epilog", señaló John.
"Durante los últimos 34 años, he fabricado más de 8000 premios Grammy y me sigue sobrecogiendo el hecho de grabar los nombres de las más brillantes estrellas en la industria. Uno de los galardones más memorables fue el Premio a la trayectoria para Bob Dylan, en 1991. Estuve presente en la ceremonia cuando Jack Nicholson entregó el premio a Dylan, de quien he sido fanático desde comienzos de los años sesenta. Ese fue uno de los momentos más gratificantes para mí", cuenta John.
John, como veterano en la industria de trofeos y galardones, es capaz de combinar técnicas de elaboración de galardones tradicionales con tecnologías modernas que le permiten ahorrar la mayor cantidad de tiempo y costos. "Es poco común ver figuras de metal en estos días y ahora, los moldes se están elaborando a máquina en lugar de a mano. Cuando elaboro un molde, algunas de las herramientas que uso tienen más de 100 años de existencia y fueron heredadas de maestro a aprendiz. Gracias a mi sistema Epilog, cuento con un nuevo conjunto de herramientas que, con mi creatividad y habilidades, me ayudará a lograr un enorme progreso, en comparación con mi modesto comienzo".